"En un mundo en que los placeres son de juguetería, los dolores no pueden ser de herrería"
"En un mundo en que los placeres son de juguetería, los dolores no pueden ser de herrería"
De un sueño escapaste en una fría noche. Corriste para guarecerte en la calidez de mi inocencia. Secaste tu lágrima un millón con mi pañuelo y duró el embrujo lo que te duran las penas...
Solo un abrazo o tu muerte pondrían fin a esta agonía.